Necesidad de otro mundo posible

      Me siento atormentando frente a la pantalla, tengo una presión fuerte en el pecho, y estas líneas buscan ponerle palabras concretas. No sé muy bien a dónde llegaremos. Resuenan en lo profundo el eco de unas palabras escuchadas esta mañana. Cuando uno choca con la realidad, sea de la forma que sea, queda "flashado". No ve más allá, como cuando nos encandilan con una luz intensa.

      Y esta vez, el choque con la realidad no fue en carne propia; sino, más bien diría, en un plano de las ideas. Puede resultar raro, pero a todos nos pasa que a veces nos colgamos pensando en algo, y en ese "colgarse", vamos haciéndonos preguntas que nunca nos habíamos hecho y a las que usualmente no sabemos qué responder. 

      Para no quedar tan colgado, primero les comparto aquellas palabras escuchadas, escritas por San Pablo.

"No se trata de que ustedes sufran necesidad 

para que otros vivan en la abundancia, sino de que haya igualdad. 

En el caso presente, la abundancia de ustedes suple la necesidad de ellos, 

para que un día, la abundancia de ellos supla la necesidad de ustedes. 

Así habrá igualdad,  de acuerdo con lo que dice la Escritura: 

El que había recogido mucho no tuvo de sobra, 

y el que había recogido poco no sufrió escasez"  

2 Cor. 8, 13-15

     No sé muy bien a dónde llegaremos; pero en un primer lugar necesitaba que compartiésemos esta palabra, escrita hace más o menos 2000 años, pero tan actual.

    Muchos tenemos la firme certeza que, como seres humanos, día a día nos convencemos que no podemos ser, sino es con y para el Otro. Nuestra vida no es aislada del entorno, del contexto; y por más que ciertos sectores se encierren en sí mismos, en sus barrios "ideales", no pueden ser ajenos de que hay un afuera, que no es así. 

    Muchos, sin dudas muchos, en distintos puntos del planeta vamos luchando desde abajo para forjar esa igualdad que Pablo pide con insistencia y esperanza. Sin embargo... ¿Cuántas veces sentimos que no alcanza y nos vemos abatidos frente a tanto? Sentirnos así nos hace acordar nuestra pequeñez y nos da esa impotencia que solemos reconocer en nosotros mismos y en tantos pares. Es que hay una lucha que a veces no forjamos del todo (digo del todo porque nuestros espacios en los barrios son espacios de resistencia). 

    La lucha a la que me refiero es contra el sistema. Y no es un planteo propio, es recordar como lo conceptualiza Francisco: "el sistema social y económico es injusto en su raíz" (1).

     No debemos acostumbrarnos a "convivir" o peor incluso "sobrevivir" en el sistema. Debemos  no sólo denunciarlo, sino también anunciar que hay otra forma de vivir, de relacionarnos entre los humanos y toda la creación. 

    Puede sonar volado, abstracto,  inalcanzable, pero eso también quieren hacernos creer. ¿Quién puede quitarnos la posibilidad de soñar? Nos dirán idealistas, pero la historia nos enseña que quienes han logrado dejar una marca, un cambio en este mundo, necesariamente lo han sido. Y fue en ese momento en que las ideas se hicieron realidad. Aquí, podríamos citar algunos personajes históricos; esta vez nos animo a que cada uno ponga rostros a esta alusión. 

     Lo que vamos forjando desde abajo, en los barrios,  es necesario, y cuánto bien hace, pero me atrevo a hacer propias las palabras que Francisco cita de  su predecesor, Benedicto XVI:

"Tenemos que convencernos de que la caridad 

«no es sólo el principio de las micro-relaciones,

 como en las amistades, la familia, el pequeño grupo, 

sino también de las macro-relaciones, 

como las relaciones sociales, económicas y políticas»" (2)

     Ya lo hemos escuchado en miles de discursos, pero es necesaria una real redistribución de los recursos; especialmente de la tierra. ¡Cuántos que no encuentran su espacio para construir su vivienda digna! ¿Acaso ya no entramos en nuestro planeta? 

     Sinceramente, más de una vez somos conscientes que no sabemos muy bien qué habría que hacer, cuesta saber cómo. Pero, como diría un amigo, dos cabezas piensan mejor que una; y cuanto más seamos, mejor entonces. Quizás la vida consiste en verdad, en que juntos forjemos una real búsqueda de eso "que hay que hacer". 

    Entendamos que, muchas veces, los problemas que sufrimos no son sólo responsabilidad de aquellos que nos representan a nivel nacional, provincial o local. Si está claro, que a veces podría hacerse mejor las cosas; pero la gran parte de la responsabilidad del estado del sistema actual está en  que los poderes económicos continúan justificando el actual sistema mundial, donde priman una especulación y una búsqueda de la renta financiera que tienden a ignorar todo contexto y los efectos sobre la dignidad humana y el medio ambiente (3). 

    Tal vez, en estas líneas deconstruyan ideas más que construirlas; pero como expresamos antes, esto es parte de la búsqueda, y me atrevo a decir que así necesariamente debe ser el comienzo. Como se aclaró al principio, es algo que presiona fuerte, por ello es necesario; más sabiendo que muchos de nosotros compartimos visiones de la realidad, y estoy seguro que eso enriquecerá estas búsquedas. Lo que está aquí no es una producción personal, sino más bien una recopilación, acotada por cierto, de horas compartidas con otros tantos que nos hacemos estas preguntas. Necesitamos convencernos que toda búsqueda debe ser comunitaria y animo a quien quiera aportar algo, bienvenido a la ronda de mates, hace bien sabernos uno más en el camino. 

     Nos dejo con dos fragmentos, no sabía cual elegir por eso comparto ambos. Sin dudas, palabras que alientan y dan real certeza, de que otro mundo es posible...

 "La esperanza nos invita a reconocer que siempre hay una salida, 

que siempre podemos reorientar el rumbo, 

que siempre podemos hacer algo para resolver los problemas " (4)

"«Como nunca antes en la historia, el destino común 

nos hace un llamado a buscar un nuevo comienzo […] 

Que el nuestro sea un tiempo que se recuerde 

por el despertar de una nueva reverencia ante la vida; 

por la firme resolución de alcanzar la sostenibilidad; 

por el aceleramiento en la lucha por la justicia y la paz 

y por la alegre celebración de la vida »" (5)

CULTURA DE BARRO

Referencias:

1 - FRANCISCO, Exhortación Apostólica Evangelii Gaudium, Ciudad del Vaticano, 2013, Nº 59

2-BENEDICTO XVI, Carta enc. Caritas in veritate, 2009; en FRANCISCO, Exhortación Apostólica Evangelii Gaudium, Ciudad del Vaticano, 2013, Nº 205
3 -  FRANCISCO, Carta enc. Laudato Si',  Ciudad del Vaticano, 2015, Nº 56
4 -  FRANCISCO, Carta enc. Laudato Si',  Ciudad del Vaticano, 2015, Nº 61
5- Carta de la Tierra, La Haya, 2000; en FRANCISCO, "Carta enc. Laudato Si'",  Ciudad del Vaticano, 2015, Nº 207