Segunda entrega de la sección musical de Cultura de Barro, hoy compartimos el tema "Cambiar la piel" del grupo Arbolito.
Sin más vueltas, acá está el tema para que lo escuches y la letra para que puedas seguirla.
Cuando hablamos de cambiar, no nos referimos a poner remiendos, sino a transformar, a que surja algo nuevo. Y como canta Arbolito mucha veces cambiar la piel duele, pero que orgullo sentimos al ver el cambio, que claro, implica sacrificio, esfuerzo.
En el cambio, sentimos ese vértigo de sentirnos desnudos, inseguros...
En el cambio, sabemos de donde venimos pero no hacía donde vamos...
En el cambio, podemos asustarnos de nosotros mismos...
Pero es justo ahí, donde pisamos la tierrita fresca y nos dejamos abrazar por el abrigo del sol, para mi, no son más que signos del amor de Dios.
Y allí preguntarnos ¿Qué habrá para aprender? Y ahí es donde nos entregamos al misterio. Pero, ¿Qué misterio?
Sin dudas, el de salir de uno mismo, de ir al encuentro del otro, mate en mano y corazón abierto. Allí, en el encuentro, nos re-encontramos y nos re-conciliamos con nosotros mismos, con el Otro, con el mundo.
Cambiar la piel, implica que algo tendremos que perder, podríamos hacer una lista personal de aquello que no nos permite caminar más libre.
Escribiendo esto, se me vienen, un montón de situaciones en que me aferro a mi piel ya resquebrajada. ¿Y vos? ¿Qué es lo que te ata y no te deja ir en búsqueda del Otro?
Ojala (me encanta usar está palabra árabe que significa "Si Dios quisiera"), que podamos meternos un poquito dentro nuestro, para cambiar piel, dejando aquello que nos encierra, sacar las vendas gastadas, y empezar a navegar sobre nuestros pies, dispuestos a entregarnos al misterio de navegar los mares de la humanidad...
Si te copa la idea, y para sabernos juntos en camino, comenta esta post con un "Yo quiero cambiar mi piel" e invita otros amigos que se sumen.
CULTURA DE BARRO
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